Uno de los aspectos que encuentro fascinante sobre Chuao es el camino del malecón al pueblo. De hecho considero que el caminarlo a solas de noche, dando paso al juego psicológico de oscuridad, los sonidos del bosque tropical y fantasmas internos, constituye una suerte de rito de iniciación.
El recorrido es de aproximadamente 5 km(como 40 minutos a pie). La carretera está rodeada por la vegetación tupida de la zona y los sembradíos de cacao, con árboles que fácilmente alcanzan los 50 metros. Su transitar es un espectáculo de colores, sonidos y aromas.
El transporte entre el malecón y el pueblo es realizado por camiones que fueron traídos por mar(no existe carretera que una a Chuao con otros sitios poblados en la costa), después de ciertas horas la única forma de transitar entre el pueblo y la playa es a pie.
Antonio Chinea